Era una foto que tenía muchas ganas de hacer... Te tienes que levantar muy temprano para llegar hasta el lugar exacto de la toma, que no suele estar cerca de casa... Una vez allí, a esperar que las condiciones de luz sean las más propicias para conseguir el ambiente que tienes en la cabeza...
Se trata de un conjunto de eucaliptos en medio de la nada, a unos cuantos kilómetros del pueblo más cercano, en Castilla-La Mancha... Las tonalidades que había en el entorno, a comienzos de la primavera, junto con la niebla tan baja, hacía que el paraje fuese idóneo para conseguir un ambiente más gélido de lo que realmente era...
Lo que más me atrapó de la imagen fue el entramado de ramas en primer plano rojizas, como impidiendo el paso para poder proseguir la marcha y llegar a los eucaliptos del fondo, que parecen querer apartarse indicando el camino hacia la luz... Dos ambientes completamente diferenciados, dos planos separados por el horizonte: en primer término, las ramas caídas entrecruzadas, casi decrépitas, sobre el manto verde de la hierba; y, al fondo, un azul frío, capaz de transmitir la gelidez del momento...
Espero que os guste y que, ahora que parece que las temperaturas comienzan a subir, nos refresque de algún modo... Saludos.
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